La representación femenina en medicamentos ¿equidad en la salud?
Una reflexión de ensayos médicos y cómo se relacionan con las mujeres
Hoy quiero acercar su atención a este fenómeno que no es totalmente nuevo pero con el proceso de la vacunación de COVID-19 ha vuelto a surgir. Hay síntomas secundarios que pasan desapercibidos en las pruebas clínicas y en algunas ocasiones las mujeres son las más afectadas.
Por ejemplo, con la vacunación distintas mujeres han percibido diferencias en sus ciclos menstruales. Cabe destacar que algunos investigadores y profesionales de ginecología no han establecido si hay un enlace de causalidad. Sin embargo, hay evidencia del boca en boca (o mejor dicho del tuit a tuit). Así es como en nuestro país como en muchos otros las mujeres han compartido sus testimonios de cambios en sus ciclos menstruales post vacunación:



La especialista y escritora del libro The Psychology of Gender and Health, María Pilar Sánchez López, tiene varias hipótesis sobre la inequidad y la poca representación de las mujeres en los ensayos clínicas, una de estas es que puede ser que en las facultades de salud no se esté enseñando con perspectiva de género entonces hay desconocimiento del tema.
Algunos otros ejemplos de la inequidad que menciona es en la salud cardiovascular porque las campañas muchas veces va enfocado a los hombres y esta causa de muerte en las mujeres se invisibiliza. También en la temática del suicidio, porque los hombres tienen tasas de más frecuencia en llevar a término la conducta suicida, los intentos son más frecuentes en mujeres.
Sánchez también destaca que no hay suficiente representación femenina en los estudios porque hay un pretexto de que hay más dificultades porque se tiene que tomar en cuenta factores como embarazos o ciclos hormonales.
También en el tema de la sexualidad femenina hay casos de malas prácticas: con el medicamento flibanserin, conocido como la viagra femenina se temía que actuara con el alcohol por lo que se hizo un ensayo clínico solo que de los 27 sujetos estudiados ¡solo 2 eran mujeres! Esto en un medicamento dirigido a mujeres, parece una mala broma.
Ya desde la fase preclínica la endocrinóloga Carme Balls Llobet menciona que este tipo de sesgos. "El 75% de los trabajos solo están hechos con ratas macho, no con ratas hembra". Aquí también se destaca que la “cuestión hormonal” es más compleja en mujeres. Parece que por estas razones algo como las alteraciones en la menstruación se pasaron por alto o bueno no se publicitan en los posibles efectos secundarios de las vacunas. Las alteraciones más comunes son sangrado menstrual abundante (menorragia), frecuente (polimenorragia) o incluso sangrado post postmenopausico.
Ahora bien, la desigualdad de género en los ensayos clínicos tiene su inicio muy atrás en la historia. De hecho, la Administración de Fármacos y Alimentos de los Estados Unido (FDA) prohibió por 3 décadas la participación de mujeres en edad fértil en los ensayos clínicos, luego se revisó que la medida era muy paternalista y se permitió la participación femenina en estudios de fármacos. Pero todos esos estudios no contaron con la participación femenina y por ende hay un vacío clínico y de estudios que muchos otros países repetieron.
Otra hipótesis de porque no hay tantas pruebas puede ser que se aumente mucho los costos de una investigación pero estamos hablando del 50% de la población por lo que es importante y a la larga afectar muchas vidas. Por esta razón investigar teniendo en cuenta el género se debe promover. Ahora bien, en la actualidad en Estados Unidos se ha puesto la medida que no se financian estudios si no hay hombres y mujeres.
Es evidente que se debe tomar en cuenta la perspectiva de género de forma transversal para tener evidencia empírica de cómo actúa el fármaco en cuestión o la enfermedad en la salud de las mujeres alrededor del mundo.